El Sardinero en Santander: Playas espectaculares y un ambiente costero único
El Sardinero es uno de esos sitios donde la brisa del mar te acompaña a todas horas. Si buscas un alquiler en Santander con vistas, paseos interminables por la costa y un ambiente tranquilo pero con vida, este barrio lo tiene todo.
Precios de alquiler en El Sardinero (actualizado 2025)
Alquilar en El Sardinero es una inversión en calidad de vida. Los precios suelen ser un poco más altos que en otras zonas de Santander debido a su ubicación privilegiada y las vistas al mar. Un piso de una habitación puede rondar los 650-800 euros, mientras que un apartamento de dos o tres habitaciones, sobre todo si tiene terraza, puede subir a los 900-1.300 euros. Los chalets o casas con jardín, si aparecen disponibles, superan los 1.500 euros, sobre todo en la zona del Paseo de Menéndez Pelayo.
Ventajas y desventajas de vivir en El Sardinero
Vivir en El Sardinero es sinónimo de playa y mar. La Playa de la Primera y Segunda de El Sardinero están a un paso, ideales para darse un chapuzón o un paseo al atardecer. Es un barrio tranquilo, perfecto para familias o para quien busque un ritmo de vida relajado. Sin embargo, en temporada alta, sobre todo en verano, puede haber más afluencia de turistas y encontrar aparcamiento puede ser un poco más complicado en las calles cercanas al Gran Casino Sardinero.
Transporte público en El Sardinero
Moverte por El Sardinero y llegar al centro de Santander es bastante fácil. Varias líneas de autobús de TUS, como la Línea 1 o la Línea 2, conectan el barrio con puntos clave de la ciudad en unos 10-15 minutos. Las paradas están bien distribuidas a lo largo de la Avenida de la Reina Victoria y la Calle Gregorio Marañón. Si te gusta caminar, un paseo hasta el centro bordea la costa y es espectacular.
Paseos por la costa y naturaleza en El Sardinero
Una de las joyas de El Sardinero es su conexión directa con el mar. El Paseo de Pereda te lleva directamente al centro y es ideal para correr o simplemente disfrutar de las vistas. Además, el Parque de Mesones, con su particular zona de dunas, ofrece un respiro verde perfecto para una tarde de lectura o un picnic familiar. Las mañanas en la Primera Playa de El Sardinero, viendo a los surfistas, son un clásico que no te puedes perder.