Ègara en Terrassa: un barrio con raíces romanas y ambiente familiar
¿Buscas un sitio con historia para vivir en Terrassa? Ègara es ese lugar. Aquí, el pasado romano y medieval se mezcla con una vida de barrio tranquila, perfecta para familias y amantes de la cultura. No es solo un lugar, es un viaje en el tiempo.
Precios de alquiler en Ègara (actualizado 2025)
Alquilar en Ègara puede salirte, de media, entre los 650€ por un piso de una habitación y los 950€ por uno de tres. Los precios varían, claro, pero te avisamos que suelen estar un pelín por debajo de otras zonas más céntricas de Terrassa. Puedes encontrar gangas, especialmente en la zona cercana al Parque de Vallparadís, con terrazas con vistas.
Ventajas y desventajas de vivir en Ègara
- Pros: Es un barrio tranquilo, con mucho verde y mucha historia. El Parque de Vallparadís es un pulmón verde enorme, ideal para paseos o picnics. Además, la presencia de las iglesias de Sant Pere, un conjunto monumental de origen visigótico, le da un toque único.
- Contras: Al no ser el centro, quizás necesites un poco más de tiempo para llegar a ciertas zonas de ocio nocturno. Aunque la verdad, la tranquilidad lo compensa si buscas paz. Algunas calles más estrechas, como las cercanas a la Rambla de Ègara, pueden ser un poco más complicadas para aparcar.
Transporte público en Ègara
Moverse por Ègara es bastante sencillo. La estación de Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) Terrassa Estació del Nord te conecta directamente con Barcelona. Además, varias líneas de autobuses urbanos de Terrassa (TMESA) atraviesan el barrio, como la L1 y L3, que te llevan al centro en un pis pas. No te preocupes, siempre hay un bus cerca de tu calle.
Un paseo por la historia de Ègara: Las Iglesias de Sant Pere
Si vives en Ègara, no puedes ignorar el conjunto monumental de las Iglesias de Sant Pere. Son el corazón histórico del barrio, con edificios que datan de la época romana y visigótica. Pasea por la Plaça de l'Abat Marcet y déjate llevar por la atmósfera. Es una joya de Terrassa, y tenerla a la vuelta de la esquina es un lujo que pocos pueden decir que tienen. Aquí se respira la historia en cada esquina, y es una zona muy popular para pasear y disfrutar de la arquitectura pre-románica.