Comprar en La Ñora, Alcantarilla: Tranquilidad y Universidad Cerca
Vivir en La Ñora es apostar por la calma sin renunciar a la buena conexión. Este barrio de Alcantarilla ofrece un ambiente ideal para familias y estudiantes, con todo lo necesario a mano y la Universidad de Murcia a pocos minutos.
Aquí encontrarás una mezcla de vida rural y urbana, perfecto si buscas un estilo de vida relajado pero con acceso fácil a servicios y ocio.
Precios de venta en La Ñora (actualizado 2025)
El precio medio de la vivienda en La Ñora ronda los 1.200 €/m², lo que lo convierte en una opción asequible. Un piso de dos habitaciones suele estar entre los 100.000 y 150.000 euros, ideal para primera vivienda o inversión.
Los chalets adosados con jardín son muy demandados, con precios que oscilan entre 200.000 y 300.000 euros, muchos de ellos con diseños modernos y espacios exteriores.
Ventajas y desventajas de comprar en La Ñora
- Pros: Ambiente tranquilo, excelentes conexiones con Murcia, presencia de la Universidad de Murcia Campus de Espinardo y buena oferta de servicios locales.
- Contras: Las opciones de ocio nocturno son limitadas, lo que requiere desplazarse al centro de Murcia para una vida más activa.
Transporte público en La Ñora
Moverte por La Ñora y sus alrededores es muy sencillo gracias a su buena red de transporte.
- Autobús: Las líneas 34 y 39 de autobús te conectan directamente con el centro de Murcia y la universidad. Las paradas están distribuidas estratégicamente, como la de la Avenida de la Constitución.
- Coche: Acceso rápido a la A-7 y la MU-30, facilitando el desplazamiento a otras localidades y a la costa.
La Ñora: Un barrio con sabor a huerta y tradición universitaria
Lo que realmente define a La Ñora es su combinación única de raíces huertanas y un espíritu joven gracias a su cercanía universitaria. Aquí, las acequias y los campos de limoneros se mezclan con la actividad de estudiantes y profesores.
Además, cuenta con la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, un edificio con elementos del siglo XVIII que es el centro de la vida parroquial y de las fiestas locales, manteniendo viva la historia del barrio.