Cerro del Águila en Sevilla: Un barrio familiar con ambiente de pueblo
El Cerro del Águila en Sevilla es un rincón con un encanto especial. Aquí, la vida se saborea a un ritmo diferente, más tranquilo y cercano. Es ese tipo de barrio donde los vecinos se conocen por el nombre y las tradiciones se mantienen vivas, un verdadero remanso de paz dentro de la bulliciosa capital andaluza.
Precios de alquiler en Cerro del Águila (actualizado 2025)
Alquilar en Cerro del Águila es una opción bastante accesible en comparación con otras zonas de Sevilla. Los pisos de dos habitaciones, ideales para parejas o pequeñas familias, suelen rondar los 550-700 euros al mes. Para viviendas más grandes, de tres o cuatro dormitorios, el precio puede ascender a 750-900 euros, especialmente si tienen alguna reforma reciente o están en fincas más modernas.
Ventajas y desventajas de vivir en Cerro del Águila
Vivir en Cerro del Águila tiene un ambiente de pueblo en plena ciudad, con una comunidad muy unida y un fuerte sentido de pertenencia. La calle Juan XXIII, que es el eje comercial, tiene tiendas de toda la vida y pequeños negocios. Como desventaja, puede que no sea la zona más céntrica si buscas estar cerca de los puntos turísticos más conocidos o la vida nocturna. Sin embargo, su tranquilidad compensa con creces para muchos.
Transporte público en Cerro del Águila
Moverse por Cerro del Águila y sus alrededores es bastante fácil. La Estación de Metro Cocheras, de la Línea 1, te conecta con el centro de Sevilla en unos 15 minutos, llegando directamente a la Puerta de Jerez o el barrio de Triana. Además, varias líneas de autobús de TUSSAM, como la línea 25 o la 26, recorren el barrio y enlazan con otras zonas clave de la ciudad. Hay paradas cada pocos metros, así que la accesibilidad es muy buena.
Tradiciones y fiestas en Cerro del Águila
Una de las joyas del Cerro del Águila es su profunda tradición. Aquí se vive con intensidad la Semana Santa, con la Hermandad de Ntra. Sra. de los Dolores como protagonista, que cada Martes Santo realiza su estación de penitencia, siendo un evento que congrega a todo el barrio. También la Velá de Santa María de la Cabeza, en septiembre, transforma las calles en un punto de encuentro con casetas y ambiente festivo, con las luces de la calle Afán de Ribera adornando todo el recorrido.